6 horas 5 minutos y 13 segundos

Eran ya las diez y media de la noche,su corazón estaba a punto de estallar,sus latidos eran tan fuertes que ya no podía más,su respiración ya no era lenta y pausada,bueno en realidad hace unas cinco horas, veinte minutos y trece segundos que había dejado de estarlo,porque a partir de ese instante una llamada telefónica ló había cambiado todo,le había dado la vuelta a su mundo tan perfecto y lo había convertido en un laberinto del cual era imposile salir. Cada minuto,segundo,hora que pasaba la voz de la persona que más amaba en el mundo volvía a sonar en su mente,tan clara y tan real como si volviera a escucharla una y otra vez al otro lado del auricular.Se puso muy nerviosa,su boca se quedó seca,las palabras por mucho que lo intentara se negaban rotundamene a salir,convirtiéndose en un simple susurro incapaz de ir más alla de unos simples,agudos e ininteligibles sonidos.Él hablaba y ella le escuchaba,su voz en aquellos momentos se asemejaba a una canción de esas que parecían ser cantadas por los ángeles,una canción que para ella lo significaba todo,una canción que podía ser el fin definitivo o el comienzo de algo que ni siquiera ella podía definir con palabras.Volvió otra vez al mundo real un mundo en el que esa llamada telefónica ya se había esfumado y sólo quedaba esperar al encuentro...
Ella ya estaba vestida y maquillada,quería estar lo más guapa posible para él, se miró en el espejo intentando perfeccionar su imagen, pero a pesar de todo ese maquillaje,detrás de esa mascarilla de pestañas y ese lápiz de ojos negro no podía esconder la tristeza que se dibujaba en sus ojos..."No puedes permitirte estar triste,no ahora joder". Intentó sonreír,pero las líneas de su rostro se negaban a curvarse ,esforzándose a producir aquello que era imposible en ese preciso instante,aquello que días antes pudo haber hecho y hacía con tanta facilidad...
Se puso los zapatos de tacón negros que iban a juego con su vestido del mismo color,esos zapatos se le había regalado él y todavía podía recordar con demasiada claridad esa ocasión y lo feliz que estuvo cuando abrió la caja y se los puso para ver si se ajustaban a su número de pie.
-Son...
-Perfectos para tí.
-Sí , en realidad son unos zapatos estupendos ,no podías haber elegido mejor.
-A mí los zapatos no me gustan.
-A no?
-No.Me han empezado a gustar ahora cuando te los pusiste, porque eres tu la que les da toda la elegancia y belleza del mundo.
Se puso roja sólo al recordarlo...Qué es eso?Era una sonrisa,la sonrisa que unos minutos antes le costaba tanto producir.De repente sonó el timbre.Ella nada más escucharlo salió pitando hasta llegar a la puerta.Cuando ya estaba a punto de abrir se paró a pensar,pero no,ahora no podía hacerlo,lo único que ahora la separaba de lo que más quería era una puerta de madera,una simple puerta,no había ningún otro obstáculo,solo ese y ella podía derrumbarlo,podia quitarlo del medio y no iba a tardar ni un solo instante más,ya no."Abre estúpida, a qué esperas?!" Tenía miedo,miedo a lo desconocido,miedo a que todo de repente se perdiera,se desvaneciera o simplemente se convirtiera en ceniza..."Abre!"Una lágrima rodó por su mejilla hasta alcanzar su cuello para a continuación bajar por su pecho blanco y perfecto...
Giró el pomo y abrió:
-Por qué has tardado tanto en abrir, acaso tienes miedo?
-NO,CLARO QUE NO!
-Entonces?
-Me...volví a...me volví a mirar en el espejo.Ya sabes ,las chicas somos así de presumidas.
-Pero a tí no te hace falta,porque esta noche estas estupenda.Y no te vuelvas a sonrojar que pareces una niña pequeña.
La dio un abrazo cálido y fuerte,eso bastó para quitarle todos los miedos,para luchar contra todos los obstáculos,para derrumbar todos los muros que había y habrá por destruír...
-No sabes cuanto tiempo te he estado esperando ...
-Mmm,exactamente seis horas,cinco minutos y trece segundos que son los que han transcurrido desde nuestra última llamada.
-No me lo puedo creer los has contado?Qué estúpido eres!JAJA!
-Acaso tu no hiciste lo mismo?
-Yo...
Antes de que pudiese pronunciar una sola palabra le dio un beso...que fue suficiente para que a su corazón le crecieran alas y lo llevasen directo a la cumbre de la felicidad...


Solo se escapó un profundo suspiro...